El hallazgo de la Bella Durmiente egipcia, como la llaman, que ha saltado a la notoriedad 45 siglos después de su fallecimiento por causas aún por determinar, indica que la zona puede albergar más sepulcros de la cultura faraónica.
Además de las sepulturas de los funcionarios y del niño, cuya identidad es otra incógnita, cerca de la sepultura de Cher Nebti fueron descubiertos cuatro pilares de piedra caliza con jeroglíficos que revelan su identidad.
Fuente: Télam