También quiero aprovechar la oportunidad para saludar a las queridas madres, Dios las ha creado para ser signo cercano de su amor y su ternura. Les regalo el don de la maternidad como la experiencia más extraordinaria que puedan tener. Las saludo y aliento a vivir en plenitud esta misión. Que el Señor les colme de sus dones.
SAN FERNANDO DEL VALLE DE CATAMARCA, 16 DE OCTUBRE DE 2015.-