Al disertar en la Exposición Internacional de Energías Renovables, el empresario precisó que la actividad azucarera dispondrá de todos sus recursos para garantizar el éxito del plan y puso de relieve que esto se debe a que los ingenios “están realizando las inversiones necesarias para producir los volúmenes que garanticen el 5% obligatorio de bioetanol para los combustibles”. En su opinión, como todo sistema nuevo, probablemente requiera de una fase de maduración, que puede incluir que en un primer momento el 5% se aplique solamente a algunos combustibles en todo el país, o a todos en alguna región. Los azucareros intentan neutralizar presiones de las petroleras para que se postergue el inicio del programa. Las productoras de combustibles argumentan que el programa no podrá comenzar si no se dispone de la totalidad del alcohol para mezclar con las naftas.
Por otra parte, al hablar de la situación internacional de la industria azucarera, destacó el comienzo de un ciclo mundial propicio que, sumado a las perspectivas que a nivel local conlleva el plan de biocombustibles, augura una zafra 2009 alentadora no sólo a nivel de producción sino también de rentabilidad. “El azúcar seguirá teniendo precios entonados”, dijo Nebbia, y acotó que los indicadores económicos de oferta y demanda positivos “se multiplican por el ingreso de fondos de inversión que salieron de otros commodities blandos”. Con estos indicadores, los azucareros esperan exportar este año 900.000 toneladas que, según el especialista, representa “todo un desafío para el sector”.
Recordó también que la actividad se encuentra en un proceso dinámico de modernización desde hace más de 10 años, por lo cual dejó de ser un monoproducto para ir consolidándose como una actividad que le aporta a la Nación tres factores estratégicos para el desarrollo: la alimentación a través del azúcar; el combustible por medio del bioetanol, y la energía a través de la producción de electricidad a partir de la caña de azúcar.
Fuente/ lagaceta.com.ar