El intendente de Azul, distrito del centro de la provincia situado a 299 kilómetros de Capital Federal, detalló no obstante que el caudal de agua bajó en las últimas horas y la situación se normalizaba esta mañana.
"Esta inundación fue la segunda en intensidad, en volumen, de Azul", enfatizó Inza al analizar las consecuencias de las lluvias que cayeron con intensidad entre la noche del viernes y la madrugada del sábado, al tiempo que recordó que la primera ocurrió en 1980.
El jefe comunal resaltó que, en esta ocasión, el desborde del arroyo "produjo muchos daños materiales y trastornos psicológicos de la gente" más afectada, como los de la mayoría de los autoevacuados y los de las 18 personas que fueron retiradas de sus respectivas viviendas por Defensa Civil local. "El caudal del arroyo llegó a 5,60 metros y el anegamiento fue muy importante en la zona ribereña, pero con un impacto también fuerte en la zona urbana", lamentó Inza.
El intendente de Azul, partido con 53 mil habitantes, agregó: "Ahora, estamos superando el trance de la inundación, resolviendo las secuelas del fenónemo climático".
Por último, agradeció a los gobiernos nacional y bonaerense por haber enviado al partido sendos equipos de emergencias para colaborar en el "operativo de socorro" implementado.
La administración de Daniel Scioli, además, envió frazadas, colchones y bidones con agua para asistir a los damnificados.