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TUCUMÁN

Brigadas especiales combatirán los incendios

La Provincia contrató dos aviones hidrantes para apoyar el trabajo de los bomberos en la Quebrada de Lules y en Los Pizarro. Llegaron unos 20 agentes de Chubut, capacitados en los siniestros de bosques. Instalarán vigías en lugares estratégicos.
(DIARIOC, 05/11/2009) Brigadas especializadas en incendios forestales llegaron a la Provincia para ayudar a controlar los siniestros que desde hace varios días parecen ensañados con los cerros tucumanos. Además, se contrataron dos aviones hidrantes que complementarán el trabajo que realizan las cuadrillas de expertos en la Quebrada de Lules y en Los Pizarro, donde las llamas avanzan desde hace varios días.
El director de Flora, Fauna y Suelos de la Provincia, Daniel Manso, se reunió ayer con funcionarios de otras reparticiones y con bomberos para reactivar el Plan Nacional de Manejo del fuego. Quedó establecido que Defensa Civil coordinará los procedimientos que se realicen en los cerros.

Fondos nacionales
Manso comentó que también solicitaron fondos del plan, los cuales no llegaban a la provincia hasta hace dos años. "Las brigadas que envía la Nación provienen de Chubut. Son alrededor de 20 personas capacitadas en el tema y con equipamiento propio", detalló el funcionario. Asimismo, comentó que el avión hidrante que había enviado el Gobierno nacional hace una semana no puede retornar a Tucumán, ya que es utilizado en dos incendios que se desataron en parques nacionales de Salta y de Jujuy. "Por eso gestionamos en una empresa privada la prestación del servicio de aeronaves ", indicó.
Los brigadistas harán un trabajo de campo con productos especiales que tienen un poder retardante para las llamas. Pero sobre todo, su tarea ayudará a los bomberos voluntarios y a los de la policía, que ya no tienen más fuerzas. Desde hace dos meses han intervenido en más de 1.000 incendios. Las altas temperaturas registradas en la provincia contribuyeron a disminuir la capacidad de respuesta del personal que viene luchando contra el fuego en forma sostenida.
El director de Defensa Civil, Fernando Torres, resaltó que la reunión fue positiva, especialmente porque se dieron pautas para actuar en los incendios que se han tornado incontrolables, como el de la Quebrada de Lules y el de los Pizarro, en la Cocha. Si bien la lluvia del martes ayudó a aplacar un poco el fuego, fue insuficiente para apagarlo y el sol de ayer reavivó los focos de incendio. En Lules se encendieron 15 nuevos frentes.
Entre las propuestas que se analizaron para enfrentar una problemática cuasi nueva en la provincia -como la de los incendios forestales- no figuró alguna que considerara imprescindible para Tucumán contar con su propio avión hidrante. No sólo por tratarse de un equipamiento costoso, sino porque también requiere mantenimiento y no es necesario usarlo todo el año, se comentó.

Proyección
Los expertos dijeron que Tucumán vivió un año extraordinario en materia de incendios, ya que se triplicaron respecto de años anteriores. Pero advirtieron que el pronóstico de que la sequía se agravará en los próximos 19 años podría convertir al fenómeno en algo común en la región. Por eso plantearon que se debe preparar una brigada especial, capacitar al personal e invertir en equipamiento.
Los incendios forestales son muy diferentes a las quemas de pastizal y de cultivos, típicas de la provincia en los meses de invierno y primavera. "En estos es más fácil el acceso para trabajar. En los fuegos forestales se cuadriplica la tarea, especialmente la manual. Es casi un labor artesanal. Hay material muy pesado y esto exige el uso de herramientas para despejar los sectores. Las llamas suelen desatarse en sectores inaccesibles. Para llegar, los efectivos se exponen a derrumbes y a otros graves peligros", opinó Carlos Cambera, que dirige a Bomberos voluntarios de Tafí Viejo.
Cambera -que también es director de Defensa Civil de la ciudad taficeña y se ha capacitado en incendios forestales- destacó que las fronteras agropecuarias se van extendiendo en el piedemonte. Por eso, no descartó que las quemas estén relacionadas con el cultivo. "No hay incendios accidentales; son todos intencionales", remarcó
En el plan de manejo de fuego es crucial instalar "avistadores" o vigías en lugares estratégicos. "Estos, conectados a un sistema de alerta permanente, son esenciales para la detección temprana de los incendios, lo cual permitirían sofocarlos en poco tiempo y evitaría que los siniestros se tornen incontrolables", resaltó. Comentó que en la actualidad los bomberos suelen llegar cuatro o cinco días después de iniciado el fuego en los cerros.

Los focos ígneos prometen durar un mes
Las lluvias que se esperan para este mes no serían suficientes para humedecer todo el colchón de hojas secas que hay en los cerros, donde cualquier llama pequeña se extiende rápidamente. Las lluvias importantes están previstas para diciembre y enero. Por este motivo los incendios forestales en la provincia prometen durar un mes.

Fuente/ lagaceta.com.ar

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