El curioso caso se generó cuando las autoridades del Colegio del Huerto, de ese centro urbano distante 50 kilómetros al norte de la capital provincial, le aplicaron una amonestación a la alumna Lucía Méndez por llevar un aro en la nariz, lo que provocó su exclusión del ansiado viaje de fin de curso.
Los directivos del instituto educacional fundamentaron su decisión en el manual de convivencia que firman los padres de quienes ingresan al instituto, donde consta que no podrán realizar el viaje de estudio los alumnos que tengan sanciones por faltas graves. (Télam)