Mónica Atrib, titular de la Dirección de Promoción Socio Alimentaria, los ejes del acompañamiento se circunscriben a la necesidad de continuar tomando conocimiento respecto de planteos, inquietudes y requerimientos de los beneficiarios. A ello se suma contar con información respecto de cuál fue el procedimiento de compra, es decir si los comercios que adhieren al sistema efectuaron las ventas, si hubo incremento de precios, etc.
Lo que buscamos es chequear si se cumplieron los objetivos que nos hemos planteado, de tal modo que el beneficiario pueda gozar del beneficio de acuerdo a las reglas de juego y que el comerciante también tenga los procedimientos adecuados para la venta de los productos incluídos en la Canasta Pro-Familia”, indicó.
Cabe señalar, que el Sub Programa Pro-Familia tiene por objetivos brindar asistencia directa a población en situación de vulnerabilidad socio alimentaria, consolidando nuevamente a la familia como núcleo básico de la sociedad, brindándole la posibilidad de elegir libremente y con autonomía dónde y qué productos comprar, comparando precios y calidad.
Con la puesta en vigencia de los Vales Pro-Familia se busca también potenciar al pequeño comerciante de barrio, promoviendo de este modo el desarrollo local.