Luego del movimiento telúrico los militares y bomberos que trabajan para rescatar a las cinco personas que permanecerían atrapadas bajo el edificio de 14 pisos que colapsó comenzaron a evacuar la zona.
En sólo algunos minutos las calles se llenaron de vehículos que iban hacia los sectores altos de la ciudad, epicentro urbano del terremoto de 8,8 grados en la escala de Richter que golpeó a Chile el pasado sábado.
En la ciudad costera de Constitución la alarma la entregó la policía por megáfonos, llamando a la población a dirigirse hacia los cerros.
Poco a poco, la información ratificada por la Marina y la ONEMI fue transmitida para tranquilizar a las miles de personas que corrieron desesperadas.
El miedo todavía persiste en Chile tras el violento despertar del pasado sábado, aunque las autoridades consideran que ya están las condiciones para comenzar con la reconstrucción.
Fuente: Telam