De hecho, los call centers de empresas de alarmas y seguros se saturan de llamadas y registran un aumento de hasta un 20% en la contratación de sus servicios. Para los especialistas en seguridad y las autoridades policiales, existen bandas organizadas que hacen inteligencia sobre los movimientos de personas y detectan las moradas solas, pasibles de ser asaltadas.
La empresa de seguridad ADT, por ejemplo, recomienda que a la hora de abandonar el hogar cada persona no dé a conocer sus planes de viaje. Además, considera que es mejor evitar dar señales que delaten su ausencia del domicilio, como acumulación de correspondencia o diarios.
"Si es posible, procure que el jardinero de confianza haga mantenimiento del jardín. En caso de no contar con las facilidades anteriores, en ausencias prolongadas pida ayuda a algunos familiares o vecinos para que enciendan y apaguen las luces, recojan la correspondencia y estén disponibles antes cualquier eventualidad", aseguran en la firma.
Javier Kahn, gerente de Nuevos Negocios de ADT, dijo a LA NACION que en los meses previos a las vacaciones de invierno y de verano la contratación del servicio aumenta levemente. "En el período anterior a las vacaciones, mayo y noviembre (invierno y primavera), las ventas se incrementan un 15%. También en verano la cantidad de señales de alarma recibidas aumenta un 10 por ciento más."
Según la empresa, que tiene 170.000 clientes en todo el país, el 98 por ciento de las señales de alarmas activadas que reciben son falsas. "También en esta época del año el call center está saturado de llamadas, porque los usuarios que salen de vacaciones suelen comunicarse para cambiar las claves o chequear los teléfonos de contacto que dejaron. Contar con un sistema de seguridad es altamente disuasivo: el 99% de las propiedades monitoreadas por ADT no sufrieron un hecho delictivo", dijo Kahn.
Por caso, en el barrio de Núñez, una zona donde suele haber robo en edificios los fines de semana, vecinos de tres edificios en la calle Quesada entre Montañeses y Avenida del Libertador comenzaron a reunir firmas para que la policía vigile la zona, ya que hay cinco obras en construcción en esa cuadra y temen que pueda ser utilizada como corredor de los malvivientes. "La policía debe exigir a las obras que tengan serenos durante la noche. Y esperemos que haya vigilancia", dijo Daniela Miranda, vecina del barrio.
En Caballito, en la avenida Pedro Goyena al 700, vecinos de distintos departamentos armaron una red de contactos telefónicos para estar comunicados y advertirse de movimientos extraños o sospechosos en la zona. "Lo importante es vigilar y llamar al 911 si hay movimientos extraños en el edificio cuando sabemos que tal o cual vecinos están de vacaciones. De esa manera nos cuidamos entre todos y nos podemos ir más tranquilos", dijo Romina Tucci, vecina de Caballito.
Amorina Gil, gerente de la División Alarmas Monitoreadas Prosegur, comentó a LA NACION que en la época prevacacional y durante el verano la demanda de sistemas de protección se incrementa sensiblemente, sobre todo para enero. "El sistema que tiene una mayor demanda es el de las alarmas monitoreadas, donde ante cualquier evento reportan una señal a la empresa de seguridad y nosotros avisamos al cliente", dijo Gil.
Equiparse con un sistema de alarma tendrá un costo de más de 2500 pesos de instalación (varía según la cantidad de sensores y dispositivos) y un abono mensual de 240 pesos si la alarma está monitoreada por la empresa. En tanto, colocar un timer de corriente sale entre 120 y 240 pesos, más la instalación.
Otra recomendación que dan los especialistas en seguridad es revisar el número en la fachada cada vivienda y que sea fácilmente visible de día y noche. ¿El motivo? Que la policía y los servicios de seguridad no pierdan tiempo buscando el lugar en caso de una emergencia.
Marcelo Durañona, director ejecutivo de la Cámara Argentina de Empresas de Seguridad e Investigación (Caesi), considera que cada persona debe hacer todo lo que esté al alcance como para demostrar que la casa no está sola. "Hay que localizar a familiares o vecinos de confianza que puedan ir a la casa a prender luces, abrir y cerrar ventanas, etc. Es importante apagar las luces en horas de luz o poner luces fotoeléctricas, por ejemplo", dijo.
En cuanto a la seguridad en los countries y barrios cerrados, Durañona recomienda no desestimar otras medidas, más allá de que estas moradas están vigiladas por seguridad privada.
"Los distintos ilícitos cometidos en los últimos años en viviendas particulares dentro de los countries nos dejan dos enseñanzas: una de ellas es la necesidad de seleccionar con mucho cuidado a la empresa de seguridad privada que se contrata. La otra es dar prioridad a la excelencia y calidad del servicio sobre el precio. Claro que el precio bajo de hoy puede ser el costoso juicio de mañana o, lo que es peor, que pueda dar lugar a que se produzcan daños irreparables a las personas, sus bienes o su patrimonio", aseguró el titular de Caesi.
Casas aseguradas
La contratación de seguros de robos en las viviendas también aumenta en las vacaciones. La firma Galicia Seguros, por ejemplo, reconoció un incremento importante en su cartera de clientes en esta época del año.
"Las ventas de seguros de hogar durante los meses previos a las vacaciones se incrementan en un 20% aproximadamente. Asimismo, la cantidad de denuncias recibidas, principalmente por robos y temporales, crecen significativamente durante los meses de enero y febrero. Y por eso recomendamos la importancia de tener la casa a resguardo a la hora de ausentarse", indicaron en la firma.
Y agregaron: "Asimismo, las pólizas de hogar cubren, también, los daños a la vivienda causados por fenómenos naturales como granizo, huracán, vendaval o tornado y, de hecho, las denuncias por temporales crecen durante la época estival".
Entre la oferta de productos, Galicia Seguros también ofrece paquetes "vacacionales", e incluso el cliente hasta puede proteger los bienes que traslade a su alojamiento veraniego, ya sea dentro del país, o en los países limítrofes, con máximo de 30 días desde el inicio del viaje.
De acuerdo con las tarifas relevadas por LA NACION en distintas compañías locales, asegurar una vivienda de dos ambientes, por ejemplo, tiene un costo mínimo mensual de 70 pesos en promedio.
Fuente | lanacion.com.ar
