El jefe de la Policía Metropolitana, Eugenio Burzaco, dispuso 400 uniformados de los 570 activos para esta jornada. La novel fuerza tiene 2000, pero deben dividirse en los turnos durante la semana. Hubo 100 pertenecientes a cuerpos especiales y el resto fueron agentes.
“El mensaje que nos deja este operativo es que la Federal y la Metropolitana pueden trabajar en forma conjunta para resolver los problemas de la gente”, afirmó Burzaco en diálogo con Infobae.com.
Cuando el juez de Quilmes Luis Armella, a cargo de garantizar el cumplimiento del saneamiento de la cuenca Matanza, dictó su resolución para desalojar a los intrusos del predio ubicando en Lafuente, entre Castañares y Portela, el 9 de marzo, horas antes habían llegada hasta allí más de 200.
En cambio, esta madrugada contabilizan un poco más de 100 los okupas, y, según fuentes del operativo policial, había hombres, mujeres y niños. Y no surgieron inconvenientes durante el desalojo más allá de gritos de algunos intrusos.
Por su parte, la ministra de Seguridad, Nilda Garré, en un parte de prensa destacó hoy el éxito del operativo de desalojo de viviendas usurpadas desde marzo en el Bajo Flores y subrayó el rol de “refuerzo complementario” de la Policía Federal Argentina en este caso.
"El procedimiento se llevó a cabo de acuerdo a las competencias institucionales que inicialmente son actividades del área de Desarrollo Social de la Ciudad de Buenos Aires y en los casos de fracaso de esas gestiones con el traslado a cargo de la Policía Metropolitana. La Policía Federal sólo hizo un cerco perimetral para brindar auxilio complementario si fuera necesario", señaló Garré.
