Los facultativos fueron acusados de "lesiones culposas" por la demora en operar a una beba, de casi un año de edad, que había tragado una pila de control remoto, lo que le produjo la muerte.
Hace dos años, los mismos facultativos ya habían sido condenados por la justicia por la misma causa, a dos años de prisión e inhabilitación especial, acusados de "homicidio culposo", pero un recurso de casación anuló la condena y dispuso un nuevo juicio.. (Télam).-