Desde hace algún tiempo el estilo del cura no satisface a los fieles y muchos se pasaron a la parroquia de La Merced. Algunos comentaron que Piccinini causó un gran disgusto en la comunidad cuando en una de sus homilías dijo que "en Marcos Juárez, la gente idolatra al dinero".
El cura, que hoy viajó a Villa María para aclarar su posición ante el arzobispo de la Diócesis, José Ángel Rovai, desmintió ante periodistas de Marcos Juárez la versión que señalaba que su intención de alejarse se debía al acoso que estaría sufriendo por parte de una mujer.
"Eso es algo que se puede vivir en todos lados, pero no es el motivo que me llevó a tomar esta decisión", aclaró el párroco, quien hace dos años sucedió en ’La Asunción’ al entonces padre Félix Garelli, que dejó los hábitos para casarse con una vecina de esa ciudad, donde reside.
Sobre este punto, Piccinini, reflexiónó: "No sé si algún sacerdote no haya sufrido acoso en algún momento. A mí no me mueve todo esto que planteo a la comunidad por una cuestión de acoso sexual. Si uno tiene bien claro lo que quiere no debe sentir temor frente al acoso de una mujer", acotó.
"Me pesa más la indiferencia -añadió-, que la comunidad no se haga cargo de lo que debe vivir. Lo que cansa, más que el acoso, es que a uno lo midan en relación a lo que otro sacerdote hizo o dejó de hacer".
"Si no puedo estar trabajando cómodamente; si no puedo hacer las cosas que creo que como sacerdote, la Iglesia y Cristo, me piden, y bueno quizás sea otro sacerdote el que pueda trabajar en esta comunidad".
"La falta de compromiso y ese tener que tirar siempre del carro, por parte de uno, hace que esto le pese al sacerdote o lo canse", se extendió.
En el Arzobispado de Villa María dijeron a Télam que por el momento, por tratarse de un caso privado, monseñor Rovai no brindará información sobre el tema.
Fuente: Telam