En la oportunidad, las autoridades recorrieron el área de la mina de cobre, ubicada a 45 kilómetros al norte de la ciudad chilena de Copiapó, las zona de trabajos para el rescate de los mineros y las instalaciones montadas en el campamento Esperanza.
En su mensaje, De Vido les dejó un "beso y un abrazo afectuoso" a los mineros y sus familiares y agregó que "estoy viendo la enorme voluntad y trabajo de los funcionarios y trabajadores para rescatarlos con un esfuerzo y calidad técnica, en el menor tiempo posible y con la mayor seguridad".
Por su parte, Mayoral señaló que “en solidaridad con nuestros hermanos chilenos, venimos a acompañar y a poner a nuestros mejores técnicos y profesionales a disposición para colaborar en toda tarea de rescate y asistencia que se considere necesaria”.
