Catamarca
Viernes 19 de Abril de 2024
Buscar:

Demoliendo mitos: manual para rever la sociedad argentina

Julieta Grosso

En su flamante obra "Mitomanías argentinas", el antropólogo Alejandro Grimson traza un recorrido por más de setenta creencias erráticas sobre la idiosincracia nacional que a pesar de su carácter infundado circulan como relatos canónicos y, según analiza, obstruyen los debates en torno a una construcción certera de la identidad.
"Los mitos que construimos acerca de nosotros mismos son una calamidad que debemos enfrentar y desmantelar. Son las mentiras sobre las cuales se sostiene la cultura argentina, una de cuyas dimensiones es nuestra cultura política. Para construir otra cultura política, necesitamos des-mitificar", dispara el autor en las primeras líneas del libro, publicado por Siglo XXI Editores.

Grimson parte de una conceptualización del mito que vincula las diferentes perspectivas que le atribuyen los estudios culturales -una mirada que lo concibe simultáneamente como explicación de la realidad y a la vez como probable falsificación de ella- para luego diseccionar las construcciones que "manipulan de manera burda los datos de la realidad".

Paralela a la misión de expurgar los equívocos que circulan desde los manuales de historia a las sobremesas familiares, "Mitomanías argentinas" se propone también como un catálogo de déficits que explican la circulación de relatos y desmesuras varias, como las que enuncia el músico Gustavo Cordera en un célebre tema -mencionado en la obra- que evoca los logros argentinos: "la calle más larga, el río más ancho, las minas más lindas del mundo...".

"En nuestro país circulan una serie de formas de hablar de nosotros mismos que son muy dañinas para una construcción democrática e igualitaria. Tenemos una inédita capacidad para pasar de ser los campeones del mundo a ser los peores, una estructura de pensamiento binaria que no nos permite entender el lugar que ocupamos realmente", explica Grimson a Télam.

"El inconformismo tiene un aspecto positivo, vinculado a aspirar una sociedad o una democracia mejor, por ejemplo: una sociedad necesita no conformarse con lo que tiene. Sin embargo, en la Argentina, este rasgo adquiere un tono enfermizo que lleva a anular la capacidad para ver lo que se ha conseguido", indica.

"En nuestro caso, el conformismo dejó de ser productivo y se transformó en una vía para destruir lo alcanzado. Todo eso está muy en el centro del lenguaje que usamos para hablar de nuestra cultura política, de la manera en la que se constituyen los conflictos, la manera en que se piensan los gobiernos...", acota.

¿La Argentina sólo tiene una salida: Ezeiza? ¿Fuimos la nación más europea de América Latina y una maldición nos arrojó al basurero de la periferia? ¿Son los paraguayos, peruanos o bolivianos los responsables del desempleo en la Argentina? A partir de estos y otros interrogantes, el autor de "Relatos de la diferencia y la igualdad" interpela al lector acerca de expresiones que forman parte del acervo cotidiano y registra modalidades recurrentes, como la ciclotimia que origina la alternancia entre momentos de gran euforia ("Argentina, granero del mundo" o la "Argentina potencia de los 70") y otros de pesimismo extremo (el "Que se vayan todos" de fines de 2001).

Grimson se remonta, también, a la idea de fracaso presente desde los orígenes del pensamiento intelectual: "No es casual que cuando Sarmiento empezó a trabajar sobre nuestro lenguaje surgió ´Civilización y barbarie´ -explica-. Esto se entronca con los distintos capítulos del pensamiento binario a lo largo de la historia argentina (peronismo-antiperonismo, militares contra democrátas, capital versus interior)".

"Deberíamos asumir qué es lo que esas dicotomías dejan afuera. Por ejemplo, cuando se habla de capital interior, se deja afuera al 25 por ciento de la población que vive en el Gran Buenos Aires. Esta omisión marca que un cuarto por ciento vive en un lugar que está fuera del lenguaje argentino y de esa dicotomía", ilustra.

Junto a la enunciación de los relatos tergiversados que atraviesan el imaginario nativo, Grimson formula que una sociedad no puede trazar sus deseos y expectativas si no define, antes, los componentes de su identidad: "Cómo podría un país saber qué desea si no sabe qué es. O si tiene una imagen ditorsionada de sí mismo. La distancia entre el país que tenemos y el que creemos tener es abismal", subraya.

"¿Qué significa que hablemos del país en tercera persona, el decir por ejemplo ´este país no funciona´? Este fenómeno de des-implicación, en el que se omite nuestra reponsabilidad, marca un terrible deficit a la hora de estructurar todos los debates políticos y sociales", apunta el autor de "La nación en sus límites" y "Los límites de la cultura".

¿Qué ocurre con la circulación de mitos contrapuestos en torno a un mismo tema? Grimson, por ejemplo, identifica en el libro relatos antagónicos sobre el rol de los medios: por un lado, las versiones que sostienen la capacidad de los medios para fijar una agenda discursiva y, por el otro, aquellas que refutan esta posibilidad.

"Hay una democracia real que exige que no haya monopolios gigantescos, así como exige que haya una distribuición equitativa de la palabra y una diversidad política e ideológica. Sin embargo, inclusive en contextos de gigantesca concentración mediática, si estos medios tienen un mensaje totalmente ajeno a la experiencia real, no van a conseguir sus objetivos. Y eso se percibe en varios procesos en América Latina en la actualidad", asegura.

"Hay procesos políticos que no pueden ser manipulados en los medios, porque hay circulaciones más complejas que trascurren en el día a día en la calle y en las redes sociales. El libro trata de demostrar que los medios tienen un poder muy grande de ocultar y catalogar, pero eso no niega que los ciudadanos contrasten esas dimensiones con sus propias experiencias", concluye Grimson.

Fuente: Télam

(Se ha leido 118 veces.)

Se permite la reproducción de esta noticia, citando la fuente http://www.diarioc.com.ar

Compartir en Facebook

Sitemap | Cartas al Director | Turismo Catamarca | Contacto | Tel. (03833) 15 697034 | www.diarioc.com.ar 2002-2024