La iniciativa se lleva adelante mediante un convenio firmado a principios de año con el Registro Nacional de Armas (Renar) cuando se ejecutó la primera etapa de recepción.
La entrega es anónima y voluntaria, en tanto las personas reciben una retribución económica de entre 200 y 600 pesos, según el tipo y calibre, al momento de entregar el arma.
El programa nacional fue implementado en el 2007 mediante Ley 26.216, y forma parte de una política integral de control y prevención de la violencia armada, que incluye medidas de control del mercado legal y medidas de persecución del mercado ilegal de las armas de fuego.
Entre los objetivos apunta a la disminución del uso y proliferación de armas de fuego y municiones; la reducción de accidentes y hechos de violencia ocasionados por el acceso y uso de armas de fuego; la sensibilización acerca de los riesgos de la tenencia y uso de armas y la promoción de una cultura de no violencia y resolución pacífica de conflictos que desaliente la tenencia y uso de armas de fuego.
Fuente: Télam