Como si fuera poco, los 5 mil pesos que le dieron de recompensa, los donó a una entidad intermedia que hace beneficencia.
Maldonado reside en La Rioja desde hace varios años y conforma el movimiento "UPAR" desde donde se ayuda a personas con problemas sociales.
El miércoles se reunió con un grupo de amigos en la confitería del Hotel Naindo y se sentó en uno de los sillones, donde sorpresivamente encontró un sobre sellado, que en su interior contenía la plata.
"El dinero que me dieron me va a servir para trabajar con mis compañeros del movimiento. Muchos de ellos no tienen una buena situación económica", dijo Javier en declaraciones a la prensa local.
"No hice más que devolver lo que no es mío", concluyó.