La segunda, fue una adolescente de 14 años, cuya identidad aún no se ha difundido. Se trata de una motociclista que recibió el impacto de un árbol que cayó sobre su cabeza en el barrio Los Naranjos.
En tanto, un colectivo de la línea diferencial D4 se vio desbordado por el ingreso del agua, ante la mirada atónita de los pasajeros que se trasladaban en él.
El temporal se desató pasadas las 15, tras una mañana calurosa y soleada, y duró apenas media hora. Pero en ese lapso cayeron unos 200 árboles, postes y estructuras de cemento que sostienen las redes de alta tensión; volaron techos de chapa, muchas calles céntricas se anegaron y hubo cortes de energía en los barrios de Las Palmas, Tronador, Santa Isabel y Talleres.
Desde el gobierno provincial informaron que el servicio de luz se normalizará en dos o tres días. Luego de la terrible tormenta, 180 distribuidores de luz, de los 300 que posee la Empresa Provincial de Energía de Córdoba (Epec) en la capital provincial, sufrieron daños, lo que dejó a más del 50% de la ciudad sin el servicio.
Por su parte, el intendente Ramón Mestre decretó la emergencia, lo que supone la conformación de un comité de crisis. Anoche, tras una reunión entre funcionarios provinciales y municipales, se anunció que los militares colaborarán con el retiro de los árboles y postes que no permiten el acceso a los barrios, mientras que Gendarmería dispondrá de 200 efectivos para garantizar la seguridad en los barrios más afectados.
De igual forma, unas 165 personas pasaron la noche en el Polideportivo General Paz, mientras que decenas de familias que se vieron afectadas se negaron a ser evacuadas por el temor a los saqueos. "La mayoría no se quiere ir de sus casas. En la zona de Arperboch había cerca de 70 personas evacuadas y no se querían mover de ahí, esperaban que baje el agua para entrar", dijo Mestre. infobae.com