Cozarinsky, autor de cuentos, ensayos, novelas, películas y obras de teatro, donó a la Universidad Nacional de Tres de Febrero su biblioteca y sus papeles de trabajo, con lo que se creó el Fondo Cozarinsky, que es parte del archivo de artistas, escritores, coleccionistas y críticos del Instituto de Investigaciones en Arte y Cultura "Dr. Norberto Griffa".
En el homenaje, el autor de "Vudú urbano" sostuvo que "uno inventa a partir de la experiencia, de cosas que a visto y leído. Lo que invento es una herencia de mis lecturas, de mi imaginación, de mis antepasados. Lo que hay de ficción en mis novelas, cuentos y películas en cierta medida es herencia".
Sobre su trabajo como cineasta, Cozarinsky apuntó que "el sonido es tan importante como la imagen. En la que por el momento es mi última película, ´Carta a un padre´, el armazón es la voz; contrariamente a lo que es el documental tradicional, la imagen comenta a la voz. La voz es el cuerpo y el cuerpo tiene que estar presente".
"En la escritura avanzo a ciegas, tengo una idea de a dónde quiero llegar pero al mismo tiempo estoy dispuesto a modificar todo en el camino, porque las ideas van surgiendo en la medida que escribo", explicó el autor de "Museo del chisme".
Y contó que "nunca he tenido la angustia de la página en blanco, se que hay que poner algo, que después lo voy a borrar, pero que ese algo va a ser el motor a partir de lo cual por diferencia u oposición voy a encontrar un camino para seguir adelante".
"Conectar cosas que aparentemente no tienen mucho que ver es lo que me ha llevado a la ficción, no solamente a la ficción escrita, sino a los ensayos cinematográficos: buscar el punto de intersección entre cosas que supuestamente no la tienen, pero al final todo se conecta", señaló Cozarinsky.
Fuente: Télam