"Lo único que hay es nostalgia por volver a casa", señaló el médico argentino, Juan Carlos Campana, quien estaba a bordo de lanave con otros 17 tripulantes.
"Están todos en muy buen estado de salud; sólo tuve que tratar las enfermedades habituales. Pero puedo decir que todos extrañansus casas", declaró el médico.
Tanto el médico argentino como los marineros de Rusia, Polonia, Ghana, las Maldivas, Filipinas y Ucrania esperan poder partir de Ciudad del Cabo lo antes posibles para estar en suscasas a tiempo para pasar con sus familias la Navidad.
El barco quedó atrapado en los gruesos hielos de la Antártida y no le fue posible abrirse paso solo, por lo que tuvo que permanecer en la bahía Ttrontungla Muskegbukta desde el 11 dejunio.