Un total de 190 dispositivos fueron repartidos desde 2012 por toda la provincia para medir los niveles de radiación del arroz cultivado en la región, consignó la agencia EFE.
En 2012, excedían los estándares de seguridad 71 sacos de arroz, mientras que en 2013 fueron 28 los que superaban los niveles establecidos por el gobierno japonés.
Todos aquellos sacos que no cumplen con los niveles recomendados son destruidos, mientras que los que los superan reciben un sello de certificación.
Los productores probaron desde la crisis nuclear varios métodos para reducir la radiación en el arroz como cambiar el fertilizante utilizado de manera que el cesio radiactivo no sea absorbido por la planta.
La central nuclear de Fukushima se vio afectada por un terremoto y tsunami en marzo de 2011 en lo que es considerada la peor crisis nuclear de la historia junto a la de Chernóbil, de 1986.
Unas 200.000 personas debieron ser evacuadas por el incidente, de los cuales unas 50.000 de las zonas en torno a la planta todavía no pudieron regresar a sus hogares.
Fuente: Télam