"Dios -continuó Francisco- es el Dios de la gran historia y de la pequeña historia, el Dios de la paciencia, la paciencia que tuvo con todas las generaciones, con todas las personas que vivieron su historia de gracia y de pecado. Dios es paciente".
Con el nacimiento de María, comentó luego Jorge Bergoglio, "estamos en la antecámara de esta historia" y "pedimos que el Señor nos de la unidad para caminar juntos y con paz en el corazón".
Francisco concluyó su homilía invitando a preguntarse si "dejo que Dios camine conmigo, o quiero caminar solo".
Fuente: Télam