La embajada, en todo caso, denegó la petición de asilo del empresario, fotógrafo y líder religioso de 73 años por el que se ofrece una recompensa de casi 500.000 dólares.
El hombre está acusado de malversación de fondos, evasión y soborno por transacciones ilegales entre la naviera Cheonghaejin Marine y empresas afiliadas que se destapó después del naufragio.
Los investigadores también analizan su presunta responsabilidad en el accidente, tras conocerse que el buque llevaba hasta el triple de la carga permitida y carecía de aguas de lastre, utilizdas para garantizar la estabilidad del casco.
Yoo Byung-eun no posee acciones de Cheonghaejin Marine pero se cree que controla de facto la empresa a través de sus hijos, que sí tienen un importante número de participaciones, informó la agencia EFE.
Tanto el empresario como sus tres hijos están siendo buscados por la policía surcoreana al no haberse presentado a las citaciones de los fiscales.
La nave, que cubrí­a la ruta desde Incheon a la isla de Jeju, se hundió tras volcar con 476 personas a bordo, entre ellas 325 estudiantes de 16 y 17 años que realizaban un viaje escolar.
Todavía hay 16 cadáveres en el interior del ferry, pero el operativo de búsqueda se encuentra suspendido al menos hasta mañana por mal tiempo.
Fuente: Télam