Según los especialistas, el terremoto influyó en la forma geoide del océano debido a la masividad del movimiento registrado. Sin tener corrientes o mareas, la superficie se toma como referencia fundamental para medir con precisión la circulación océanica, los cambios del nivel del mar o la dinámica de los hielos polares.
Roland Pail, experto de la casa de estudios que fue sede del encuentro, aseguró que las modificaciones registradas acelerarán un cambio climático en la zona afectada por la catástrofe.
Fuente: minutouno.com.ar