La Virgen en su bendita advocación del Valle caminó al encuentro de todos sus hijos y llegó hasta los extremos del predio donde se encuentran oficinas, talleres y depósitos del Centro Administrativo; así, llegó hasta el sector noreste, donde muchos empleados se vieron emocionados por tan grata visita, y dejaron sus tareas para acercarse a saludarla.
Por su parte, los agentes del Grupo Especial Kuntur esperaron a la Imagen en el extremo norte del predio y le obsequiaron una ofrenda floral.
Luego volvió visitando otros pabellones, y una vez en la Plaza de Armas, el P. Eugenio Pachado, Capellán de la Catedral Basílica, les dio la bendición a todos los presentes.
Más tarde, el P. Angel Nieva celebró la Santa Misa de la que participaron todos los presentes.
Finalmente, le pidió a la Virgen que, en su rol de Madre, bendiga a todas las madres trabajadoras en su día.