Valcárcel pidió "serenidad" a los afectados, muchos de ellos inmigrantes latinoamericanos y del norte de Africa, y explicó que hay varios equipos evaluando los daños causados por los dos temblores, que tuvieron una magnitud de 4,5 y 5,2 grados, respectivamente.
"Lo importante es que los vecinos cuyas casas no hayan sido dañadas puedan volver a la normalidad", agregó.
Los sismos de ayer causaron en Lorca ocho muertos, todos ellos de nacionalidad española, así como unos 260 heridos, según el último recuento de las autoridades locales.
Lorca ya había sufrido terremotos el 28 de agosto de 1674 y el 20 de diciembre de 1818, ya que la localidad se encuentra en una de las zonas de mayor riesgo sísmico de España. (Telam)