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TUCUMÁN - ATAQUES A MENORES

“Estaba paralizada de miedo, no podía ni gritar”

Una mujer rescató a su hija y a su sobrino cuando un desconocido intentaba llevarse a la nena, que jugaba cerca de una iglesia.
(DIARIOC, 16/03/2009) El fantasma del violador serial se reinstaló en Yerba Buena. Ayer, un desconocido intentó secuestrar a R., una nena de siete años que jugaba con otros niños de su edad en la vereda de una iglesia. “De sólo pensar que quizás haya sido ese hombre el que tocó el brazo de mi hija se me eriza la piel”, dijo asustada Jorgelina, madre de la nena.

Recientemente, la Justicia confirmó que un abuso sexual perpetrado en Yerba Buena en marzo de 2008 era de autoría del violador serial. El hombre también ha abusado de al menos cuatro nenas en barrios del sur de la capital. “Estaba muy preocupada por ese tema y justo vino a pasar esto”, señaló Jorgelina.

Desde el mediodía, decenas de personas participaban de la misa en la iglesia La Caridad, ubicada en la esquina de Perú y Panamá. En la vereda, ocho niños jugaban cuando apareció un hombre de unos 35 años. “Dicen los chicos que lo vieron bajarse de un VW Gol blanco y que el auto siguió camino, pero no lograron ver quién manejaba”, indicó Pablo, padre de la víctima.

Sin adultos cerca

Cuando el desconocido se acercó al grupo de chicos no había adultos cerca. El hombre medía cerca de 1,75 metro; tenía barba desprolija, cabello despeinado y vestía prendas desgastadas. Llevaba un bolso negro en una mano y una botella en la otra. “Sus modales eran totalmente opuestos a su aspecto, porque les habló muy cordialmente a los chicos”, señaló asombrada Jorgelina.

El hombre fue directamente hacia donde estaba R. “Vamos, vamos”, le dijo con tono amable a la nena mientras la tomaba del brazo. Desde el drugstore, Jorgelina logró ver la dramática escena. “Salí corriendo. Cuando llegué ya la había soltado, porque mi sobrino de 12 años estaba ahí y se había dado cuenta de todo”, dijo la mujer. Explicó que quedó shockeada, sin saber cómo reaccionar. “Abracé a mi hija y a mi sobrino, los traje a mi casa y me encerré con ellos. Estaba paralizada por el miedo, no podía ni gritar”, indicó.

Segundo ataque

Al parecer, el hombre intentó secuestrar otro niño, pero no lo logró. “Dicen los otros nenes que se acercó a un chiquito que estaba pidiendo monedas y le empezó a decir ‘vamos para la casa’, pero por suerte no logró llevárselo”, añadió Jorgelina.
Se desconoce en qué momento el desconocido decidió marcharse. Tomó a pie por calle Perú, hacia el oeste, y luego desapareció.

Tras el hecho, familiares y vecinos salieron en busca del hombre que intentó secuestrar a R. Aunque recorrieron la zona en automóviles y motocicletas, no encontraron rastros del desconocido. “Es rarísimo, porque a los cinco minutos de lo que pasó eran varias personas buscándolo, incluso motos de la Policía, pero era como si hubiese desaparecido”, añadió la mujer. Hace nueve días, a unas 20 cuadras de la iglesia La Caridad, una nena de Villa Luján fue secuestrada por un hombre que estaba en una motocicleta negra. “Te voy a llevar al banco donde está cobrando tu papá”, le había dicho el depravado a la niña. Ella intentó resistirse, pero fue inútil.

A las dos horas, fue hallada en barrio Marti Coll. Aunque no abusó sexualmente de la menor, el depravado la manoseó antes de escapar.
Alertados por este y otros ataques, los padres de R. realizaron la denuncia en la comisaría de Yerba Buena. “Lo que pasó es muy grave y es importante que entre todos nos cuidemos de este tipo”, indicó Pablo. “Quizás no haya sido el violador serial, pero nadie nos asegura que este hombre no secuestró alguna nena después de que se fue de acá”, finalizó preocupada Jorgelina.

Fuente/ lagaceta.com.ar

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