"Además de desandar los perfiles de ese temperamento multifacético y exhuberante, he procurado incorporar las interpretaciones posteriores que se han hecho de su obra, poner énfasis en sus medidas de política interna y analizar el papel que desempeñó luego en los países emancipados", explicó Bushnell a Télam.
"Incluso aunque discrepe con la tesis bastante difundida hoy día (sobre todo entre los seguidores del presidente Hugo Chávez) que lo erige en un verdadero revolucionario social; más bien lo veo como un reformador ilustrado que no confiaba en el pueblo raso y que con los problemas financieros de posguerra buscó dar marcha atrás a las innovaciones institucionales". (Télam).-