“En realidad no se trata de una operación sino de un procedimiento, donde se busca un donante que sea compatible con el paciente. Ese procedimiento puede hacerse a través de lo que se llama la extracción de sangre periférica o de un procedimiento quirúrgico en el que se extraen células de cerca de la cadera del donante”, detalló el especialista.
“Lo que se le transfiere es un líquido con el color de la sangre pero en realidad son células que se le infunden al paciente como si se tratara de una transfusión”, dijo, usando un lenguaje coloquial, Morales.
Según el especialista, en casos como el del joven Agustín Bustos Fierro hay tres etapas cronológicas que se deben cumplir en el procedimiento. La primera, conseguir el donante compatible, que en este caso no estaba entre los familiares. Después, realizar el procedimiento, luego del cual se realiza un tratamiento de quimioterapia que reduce las defensas del donante. En esta etapa es indispensable mantener al paciente en un lugar aislado para evitar enfermedades y por último, evitar que las lesiones avancen.
“Los resultados de este procedimiento aún están en etapa experimental, pero por lo que ha aparecido en publicaciones especializadas la técnica no agrega nada, pero si la enfermedad es incipiente el trasplante podría detener el curso de la enfermedad”, indicó.
Morales resaltó que el procedimiento se podría haber realizado en el Hospital Garrahan, en la Ciudad de Buenos Aires.
“Probablemente, lo que inclinó a la familia a ir a Estados Unidos es que el médico que los atendería incluye un procedimiento sencillo -aclaró-, que significaría un mejor tratamiento después del procedimiento.
Agustín Bustos Fierro padece de ALD, una enfermedad hereditaria, incluida en el grupo de las leucodistrofias, que produce una desmielinización intensa y la muerte prematura en niños, como consecuencia de la presencia en el organismo de niveles circulantes elevados de ácidos grasos que provoca insuficiencia suprarrenal.
Entrevista de Omar Pereyra
Fuente: cadena3.com