El público, integrado en su mayoría por jóvenes y adolescentes, comenzó a ingresar desde temprano y a ganar ubicación en la sala. Desde el inicio y hasta el desalojo de la sala hubo una fuerte custodia policial que, sin embargo, solo realizó prevención e intervino para organizar el ingreso del público, apoyando la tarea del personal del teatro.
Aunque la tensión estuvo hasta el último minuto, todos compartieron la celebración del triunfo que pone a Argentina en la final de la Copa del Mundo.
Fue otro día de fiesta que permitió a una importante cantidad de jóvenes disfrutar del partido de la selección en alta calidad y en pantalla gigante y continuar luego los festejos en la plaza principal, uniéndose a los miles de catamarqueños que salieron a festejar el triunfo.
Por cábala, muchos de los asistentes al cine prometieron volver a ver la final, el próximo domingo, en el Espacio INCAA Catamarca, uno de los 38 puntos de aliento del país.
Fotos: Secretaría de Cultura / Ariel Pacheco