Los trabajos, fueron encarados por la municipalidad capitalina con fondos de regalías mineras, y significan una puesta en valor de un espacio muy visitado por promesantes, a fin de ofrecerles un mejor lugar en aspecto estético y comodidades. En esta ocasión, fueron habilitados nuevos baños, para ambos sexos, pérgolas, lugares de descanso con bancos, parquización con árboles y plantas florales y caminerías; instalaciones que fueron adaptadas para personas discapacitadas.
Previo a la bendición de la obra, el obispo Luis Urbanc reflexionó sobre el origen y la significación que tiene para la provincia la Virgen del Valle. “Tenemos que cuidar y preservar este lugar, porque es un emblema. Toda Catamarca creció en torno a la realidad de la Virgen, entonces podemos decir, que este es el tesoro escondido en el campo que hemos encontrado”, dijo.
Por su parte, el secretario de Hacienda de la comuna, Daniel Castillo, afirmó que desde el municipio se trabaja con el fin de posicionar turísticamente la ciudad, buscando diferenciarla de otras, resaltando su esencia, sus atractivos y los fundamentos que hacen que los visitantes vengan a ella”. También, explicó que en este sentido definen la provincia con el slogan: “Catamarca Capital de Montaña y Catamarca Ciudad de la Fe”; remarcado que “las montañas definen nuestro perfil de ciudad y nuestra idiosincrasia, pero que además, se percibe que Catamarca es ciudad de la fe”.
Cabe señalar que otras de las obras que ejecuta la municipalidad con fondos de regalías mineras es la iluminación y refacción de la palacio del Obispado de Catamarca y de la santería situada al lado de la Catedral Basílica.