La gigantesca masa de agua que se sigue acumulando en la zona ejerce una titánica presión sobre las ya dañadas ciudades y localidades de Bandera, Pinto, Casares, Malbrán, Guardia Escolta, Real Sayana, entre muchas otras no menos complicadas.
Muchas se ven afectadas por los problemas estructurales que comienzan a padecer sus edificaciones (viviendas y otros edificios), que se hunden y fisuran; otras han sido afectadas por kilómetros de líneas eléctricas que caen porque el suelo se transformó en un barro casi líquido que no pueden dar sustentación a los postes y cableados de las líneas eléctricas (ver abajo). Además, el sector productivo ha sido ferozmente herido en la presente campaña. Al respecto, Carlos Cejas, miembro de la comisión directiva de la Sociedad Rural del Sudeste, reveló que, más allá de las 60 a 80.000 hectáreas que pueden verse directamente bajo un gigantesco espejo de agua, las tierras afectadas por este excepcional meteoro alcanzan a unas 300.000 hectáreas. Para dar una idea más práctica de lo que esta enorme extensión representa, Cejas graficó: "El departamento Belgrano (donde se asienta Bandera) tiene unas 330.000 hectáreas en total, de las cuales alrededor de 200.000 han sido afectadas; y en el departamento Taboada el agua perjudica a unas 100.000 hectáreas de las 530.000 que tiene en total, aproximadamente". Por afectadas, Cejas se refiere no sólo a los terrenos que se hallan directamente bajo agua, sino también a aquellos en los que la napa está a apenas 2 o 5 centímetros debajo de la superficie, lo cual impide trabajar los campos de cultivo y seca los que ya estaban sembrados y/o creciendo. De allí que el ruralista hablara de una situación por demás caótica, ya que estos campos afectados tenían cultivos de soja y maíz en un 95% del total, por lo que las pérdidas serán varias veces millonarias, afectando no sólo a la ciudad de Bandera sino a toda la zona. "Estamos pensando pedir la emergencia agropecuaria", mencionó Cejas, quien estimó una pérdida global de la región Sudeste de alrededor de 60 a 70% del estimado de cosecha. Impresionante Notoriamente afectado por esta situación, Cejas fue más allá de lo agropecuario y mencionó dos datos más que dan cifras a la envergadura de la tragedia que vive la zona: "Tenemos 300 kilómetros de caminos rurales destruidos, y 300 kilómetros de líneas eléctricas de media tensión con problemas de estabilidad por falta de sustentación", debido a que el suelo está anegado.
Fuente: elliberal.com.ar
