El hecho ocurrió el lunes 6 de abril a las 17.30, cuando el teléfono sonó en una vivienda ubicada en la zona sur de Córdoba.
La nena de 7 años, atendió el teléfono y una voz preguntó por su mamá. "No está", contesto y de inmediato le dijeron: "Ella tuvo un accidente". Así, el delincuente del otro lado intentaba engañar a una familia para estafarla y robarle su dinero.
Pero para la nena, la situación se tornó confusa, porque su madre no estaba fuera de la casa, sino que en el baño. Su papá, al ver la cara desconcertada de su hija, agarró el teléfono y comenzó a grabar la conversación.
Una vez que tenía bastante material guardado y la negociación continuaba con los delincuentes, el hombre comenzó a llamar al 101 (la línea policial de Córdoba) y, luego de reiterados intentos, una patrulla se acercó a su domicilio.
El dueño de la casa, pensó que podrían continuar con el engaño para encontrarse con los delincuentes y detenerlos, pero sin embargo, frustraron la comunicación telefónica.
El hombre sintió que perdió una oportunidad valiosa para rescatar y poder atrapar a los extorsionadores ya que la policía no se mostró nada interesada en realizar el operativo.
Fuente. minutouno.com