Cineasta y documentalista, doctora en Filosofía por la Universidad de Viena y responsable de la cátedra de New Art Media de la Academia de las Artes de Berlín, Steyerl reflexiona sobre el ideario y la práctica política en una era en que las utopías y los deseos colectivos se desplazaron a las pantallas.
Se trata de una de las más destacadas pensadoras y artistas alemanas en el campo de la imagen y la política del arte, quien postula que el flujo de imágenes producido por el capitalismo de la información ya no entrega representaciones, sino fragmentos del mundo que participan en él, modificándolo.
Una de estas reflexiones toma cuerpo en el CAC -Antártida Argentina 1355- donde hasta el 30 de noviembre los visitantes encontrarán una pequeña salita de video, que reconocerán a partir de una serie de elementos que deberán recorrer antes de entrar y que al salir, una vez vista la grabación de "Cómo no ser visto...", adquirirán nuevos significados.
El valor de esta videoinstalación reside entre otras cosas, en que es una de las más recientes de la artista que representará a su país en la Bienal de Venecia 2015, y que pasó por la feria Documenta de Kassel, las bienales de Shangai y Taipei, el Art Institute de Chicago y el ICA de Londres entre otros espacios representativos de la vanguardia mundial.
Entre los tópicos que Steyerl analiza y que de alguna manera atraviesan los ensayos recopilados por Caja Negra, están "la circulación masiva y descontrolada de las imágenes en baja resolución"; "el arte contemporáneo como baluarte del capitalismo"; "el lenguaje de la protesta política a través de los dispositivos del cine" y "los fantasmas de la era 3D".
La publicación de este volumen es un pequeño acontecimiento por varios motivos, por un lado traduce y reúne por primera vez textos que circulaban desperdigados y, por otro, muestra cómo el trabajo escrito de Steyerl se alimenta de sus técnicas de construcción audiovisual.
A la vez que, de una manera parecida a las paradojas con que suele jugar la artista nacida en Munich en 1966, evidencia la profundidad ensayística de sus videos.
En un diálogo que mantuvo en el porteño instituto Goethe con Expósito, traductor de sus textos, además de docente y videasta, Steyerl se refirió al vínculo entre su trabajo con el pensamiento de Walter Benjamin.
"Es interesante hablar de la tarea del historiador como la de alguien que puede, en un flash, cristalizar un momento de la historia para analizarla -dijo-. Especialmente en una era donde prima la imagen mediada por los cristales líquidos de las pantallas", incluso los que la mostraban hablando, en videoconferencia, desde su cocina en Berlín.
Un devenir que ya había plasmado en videos como "Strike", a la vez golpe y huelga en inglés, un pieza corta que la muestra golpeando un LCD, "no para congelar una imagen, sino para develar la matriz de cristales líquidos necesaria para mostrar cualquier imagen", logrando "perder toda posibilidad de control o vigilancia".
"Los condenados de la pantalla", título de esta compilación, juega con "Los condenados de la tierra", libro del filósofo y psiquiatra martinicano Franz Fanon (1925-1961), cuyo pensamiento movilizó parte de las revoluciones antiimperialistas del 68 francés.
"Cito a Fanon en defensa de la imagen pobre asociada al concepto de proletariado -como masa política ambivalente, a la vez lumpen y capaz de revelarse contra el capitalismo- para linkearlo con la circulación contemporánea de las imágenes", señaló.
Aunque ese título es también el de uno de sus ensayos de 2009, aclaró que "ya no existen esas imágenes pobres tal como las que menciona el texto: Su resolución mejoró notablemente y hoy se puede lograr alta definición desde un celular. Aquellas imágenes migraron hoy fuera de la pantalla, en panfletos de los que la gente no es consciente".
Durante la videoconferencia Expósito le mostró un fotograma del filme militante "La hora de Los Hornos", de Pino Solanas y Octavio Getino, en el que se reproduce una cita de Fanon en una pancarta dentro de una fábrica en huelga: "Todo espectador es un cobarde o un traidor".
La artista que ya había hecho una videoinstalación en Asia reemplazando al sujeto de la frase por artista, curador y obra de arte en banners que parecían publicitarios, se mostró emocionada de finalmente dar con la imagen: "La busqué por años" y "empecé a creer que era una suerte de leyenda", señaló.
Entre sus paradojas Steyern se pregunta done se proyectan los filmes políticos y concluye que en las mismas fábricas donde fueron filmados, "espacios vaciados por las industrias llevadas fuera de las metrópolis que hoy arquitectos estrellas convirtieron en museos".
El vínculo del museo con las fábricas o la lógica de las fuerzas laborales, las estructuras militares o el campo de refugiados son otras de las cuestiones que esta artista analiza y que en este libro incluyen perlitas como "Desaparecidos: entrelazamiento, superposición y exhumación como lugares de indeterminación".
Fuente: Télam
