El 1 de septiembre, ocho estudiantes murieron en el accidente, mientras una joven continúa desaparecida y otros seis y el guía de montaña a cargo de la expedición sufrieron heridas de distinta consideración.
Mientras la causa penal iniciada por el juez federal Leónidas Moldes sigue su curso sin novedades, la Universidad prepara una ceremonia especial para honrar la memoria de los jóvenes fallecidos.