Fuentes judiciales indicaron a Télam que todo indica que los asaltantes entraron por el fondo de la casa y accedieron por alguna puerta o ventana que se encontraba abierta o sin llave.
"Hay mucha gente que no le pone llave a las puertas y no sabe que los ladrones con experiencia pueden abrirlas tan sólo con una tarjeta plástica", dijo a Télam uno de los investigadores.
Sin embargo, los investigadores no descartan que los ladrones tuvieran las llaves de la casa o hayan tenido la colaboración de algún entregador para el ingreso, y en ese sentido, están bajo la lupa la empleada doméstica y los vigiladotes de las garitas que hay en la manzana.
"Por el momento no tenemos elementos para acusar a nadie, pero siempre se investiga a los empleados y los vigiladores, más en este caso donde hay tres garitas a pocos metros de la casa de Gallardo y nadie vio nada", agregó la fuente consultada.
El caso es investigado por el fiscal de Martínez Gastón Garbus, quien espera los resultados del levantamiento de rastros y la inspección de los accesos que realizó ayer la Policía Científica de San Isidro con la intención de poder determinar por dónde entraron y si dejaron alguna huella o evidencia que pueda servir para identificarlos.
Fuentes policiales indicaron a Télam que los peritos lograron levantar algunas huellas en la casa que ahora serán primero cotejadas con las de Gallardo, su familia y la empleada y, luego, cargadas en la base de datos del sistema AFIS, para ver si alguno de los autores tiene antecedentes.
El robo se inició la noche del viernes en la casa que el volante de River tiene en la calle Lavalle entre San Isidro Labrador y Colón de Martínez, partido de San Isidro.
Gallardo había salido a cenar con su esposa y en la casa quedaron la empleada doméstica y dos de los hijos del matrimonio.
Dos ladrones aparecieron en la vivienda, redujeron a la empleada y los chicos y esperaron dentro de la casa hasta que Gallardo y su esposa llegaron a la madrugada.
Los delincuentes, que no fueron violentos, se apoderaron de cuatro relojes Rolex y los 7.000 pesos y 3.000 dólares en efectivo que el futbolista les entregó y luego escaparon sin que hasta el momento hayan sido identificados ni detenidos.
El fiscal Garbus espera que el enganche de River y su esposa se presenten formalmente a declarar para dar una descripción detallada de los asaltantes que actuaron a cara descubierta.
