La empresa estatal informó en un comunicado que un equipo de 10 técnicos trabaja en la embarcación P-34, donde realizan pruebas hidrostáticas para garantizar que un segundo tanque pueda recibir otra inyección de agua, para reducir la inclinación.
El personal de Petrobrás se dispone ahora a conectar otro tubo entre un barco de apoyo y las cisternas del lado opuesto a las que están cargadas de petróleo y causaron la inclinación. (Télam-SNI)