Basándose en que “uno de los problemas más graves es la forestación inadecuada”, después de las sucesivas campañas que se han venido haciendo durante los últimos cinco años, en las que se han incorporado más de veinte mil árboles a la ciudad, el área ha realizado un relevamiento de los distintos sectores de la ciudad para “empezar a trabajar en una paulatina reconversión del arbolado”.
Según se explicó la funcionaria, “mucha gente es reticente a que se extraiga los árboles, a nosotros también nos cuesta muchísimo tomar la decisión, pero cuando hablamos de reconvertir la idea es ir plantando el ejemplar que va a reemplazar al árbol que a lo mejor dentro de tres o cuatro años sabemos que lo vamos a tener que sacar”.
Hay algunos árboles que no solamente están haciendo daños importantes en las veredas y pavimento, sino que además plantean situaciones de riesgo para las viviendas inmediatas, o sea que “planteamos la extracción no porque el árbol sea un poco grande o una especie que no es la contemplada en el plan director, sino que hablamos de situaciones de riesgo”, puntualizó.
En ese sentido, evaluó que lo importante es el trabajo de mantenimiento del arbolado “porque no es solamente plantar árboles y regarlos, sino que después hay que mantenerlos con podas y controlando el crecimiento”.