Uno de los sectores más afectados fue el sur capitalino, donde Lucía visitó casa por casa en las cuadras más castigadas, y dialogó con la Hermana Jimena, quien le detalló las inquietudes de los vecinos.
Inmediatamente después, Lucía dispuso el envío de los aportes solicitados, que incluyeron diversos elementos para sobrellevar las primeras horas posteriores al fenómeno climático.
Al margen de los inconvenientes generados por la situación, sobre todo entre quienes habitan las casitas más precarias, el panorama no revistió la gravedad de otras inundaciones, ya que la acumulación de agua tuvo un mayor efecto en las calles que en las viviendas.
Lucía consideró que estos problemas quedarán definitivamente superados cuando se concreten las obras de urbanización de los históricos asentamientos, trabajo para el cual se destinó un total de 150 millones de pesos.
Los barrios Cristo Rey, Virgen del Valle, Los Médanos, Villa Eumelia, Virgen Niña y Montecristo son los principales sectores contemplados en el “Plan Maestro”, que se ejecutará con fondos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Las tareas se iniciarán este mismo año, y cambiarán definitivamente la realidad del sector comprendido en la ribera del Valle, donde se van a llevar a cabo obras de conexiones de cloaca, luz, saneamiento de títulos; la creación de espacios verdes y de recreación, apertura de calles, planificación urbana, la construcción de salones de usos múltiples, el tratamiento de médanos desde el punto de vista ambiental, cordones cuneta, asfalto, veredas con canastos, saneamiento ambiental, entre otros, además de otras obras complementarias, tales como el corrimiento del canal de riego, tratamiento de desagües pluviales y la reinstalación de las líneas de media tensión.
Este megaproyecto es la única solución para estos barrios, ya que la falta de previsión con que se desarrollaron impide cambiar la situación actual sin un proyecto de fondo.