Mientras tanto, los pobladores de la localidad están esperando la vuelta del ministro de Obras y Servicios Públicos, Juan Acuña, y del gobernador Eduardo Brizuela del Moral, ya que ellos son los que decidirán si ponen en marcha un plan de emergencia que están preparando técnicos oficiales.
Entre las ideas que se manejan está llevar a Pomán los grupos electrógenos que fueron instalados en el Predio Ferial durante la Fiesta del Poncho, por lo cual la Provincia debería costear los gastos de mantenimiento, incluyendo el combustible para hacerlos funcionar.
También se estudia quitar de la línea de 13,2 Kv que va a Pomán a emprendimientos agrícolas, para conectarlos a la doble terna de 33 Kv que tiene como extremo Andalgalá.
El intendente Gordillo había dicho que los diferimientos estaban “enganchados” de la línea que abastece al pueblo, y que esto provocaba constantes variaciones de tensión en el servicio.