La misa principal fue oficiada por el arzobispo, monseñor Luis Villalba, quien exhortó a los fieles a imitar la humildad de la Madre de Dios y a no caer en el pecado de la soberbia, que aleja del Señor y del prójimo.
La ciudad de Concepción fue el segundo centro donde concurrieron también miles de peregrinos del sur de la provincia. Allí, el obispo, monseñor José María Rossi, pidió que cada uno asuma la responsabilidad que le toca en la Vida, como lo hizo María cuando aceptó su misión divina. En el resto del país, los santuarios más visitados fueron los de Catamarca, de Luján, en Buenos Aires, y de Itatí, en Corrientes.
Fuente/lagaceta.com.ar