Rodríguez informó que el al morirse dos monas alfas por vejez, el grupo de simios se deprimió y murieron cuatro de ellos. Ante esta situación, empezaron a investigar la causa y tras realizar varios análisis, concluyeron en la necesidad de recurrir a la psiquiatría.
“Nos ha sorprendido lo que pasó”, señaló en primer término. “Hicimos la consulta con un Doctor personal, le comentamos lo que veíamos, ciertas conductas y comportamientos cambiados. Se negaban a comer, no había forma, ni siquiera se refugiaban, se quedaban tirados con un depresión terrible”, sostuvo.
“Hace mucho que trabajo y nunca vi algo así”, admitió Rodríguez. A pesar de la gravedad del caso, les costó confiar en esta alternativa: “Nos parecía descabellado que le dieran medicamentos antidepresivos aunque sea en mínimas dosis. Pero, empezaron a levantar su ánimo”, manifestó.
Según explicó, los monos “son animales muy familiares, están en grupos, no son solitarios. Sufren maltrato y enseguida aparecen alteraciones que se manifiestan en el comportamiento”.
El lugar funciona como centro de rescate: “Hay mucha gente que compra animales de este tipo y después no saben qué hacer con ellos. Devolverlos al medio es imposible por lo que no nos queda otra que rescatarlos”, agregó. 26noticias.com.ar