La ex modelo está decidida a conseguir el divorcio y a quedarse, además, con la custodia de los pequeños Sam, de dos años, y Charlie, de 10 meses, ya que, según asegura el Post, no cree que Woods sea una buena influencia sobre sus hijos, no sólo por sus infidelidades, sino también por su adicción al sexo.
“Tiger tenía que mejorar y no ha hecho nada para ello. No ha ingresado en una clínica de desintoxicación ni ha dejado de tomar sus pastillas. Está actuando como un niño grande”, explicó una fuente cercana a la todavía mujer de Woods.
La misma fuente, que cuenta que la aún pareja pasará las fiestas navideñas por separado y empezarán el nuevo año ya alejados, dijo que Nordegren quiere “el divorcio a un ciento por ciento, la custodia a un ciento por ciento y la mitad de todo, y no va a cambiar de opinión”.
Woods y Nordegren centran la atención mediática estadounidense desde que a finales de noviembre el deportista sufriera un extraño accidente de automóvil ante las puertas de su casa y saltara a la luz que la posible causa del mismo fue una agresión por celos por parte de su esposa.
Fuente: El Liberal