Marcelo Acuña, recordó quien fue Luís Fernando Acuña y porque el valor de la donación. “Recuerdo haber escuchado hablar mucho de Luís Fernando Acuña en mi familia, se contaban historias que no nos cabían en la imaginación, como alguien, un catamarqueño igual a mi padre, hubiera tenido una vida tan extraordinaria tomando la extraordinaria decisión de ir a pelear en una guerra que a todas las luces le era ajena”.
“Luís Fernando Acuña se enlisto como soldado en la legión francesa, destacándose por su participación sobresaliente en una batalla cruenta como pocas, donde obtiene esta medalla, el 12 de enero de 1918, por un acto de arrojo en un golpe de mano, que eran misiones exploratorias que se realizaban, antes de una batalla, sobre las líneas de defensa alemanas”, contextualizo Marcelo Acuña en relación a la donación.
“Este hombre, recibió grandes heridas en el pie y en la mano, tanto que luego perdió su mano. Por eso recibió el apodo del “manco Acuña” y estas heridas recibidas en la guerra, le valieron el permiso para retirarse a su hogar junto con la condecoración” que ahora se exhibirá en el Museo histórico.
Por su parte el Sr. Segundo Acuña entregó un reglamento del Poder Legislativo, manuscrito del año 1827.