Estos delitos fueron cometidos en perjuicio de la hija menor de edad de la concubina del condenado, y los miembros del tribunal ordenaron que el imputado continúe alojado en la cárcel penitenciaria local.
A.G.L. fue encontrado culpable de haber abusado sexualmente de la hija menor de su pareja, en abril de 2011.
El hecho salió a la luz cuando en diciembre de ese mismo año, la menor de 13 años rompió bolsa y dio a luz a un niño, hijo del imputado.
Hasta ese momento, nadie en la familia se había dado cuenta del embarazo, pero una vez que el bebé nació, la niña denunció que A.G.L. había abusado de ella una noche, al llegar de jugar al fútbol.
El imputado convivía con ella, sus hermanas mayores y su madre desde hacía un año y medio.
La víctima dijo que se enteró de que estaba embarazada al mes, pero no se animó a contarlo por miedo y vergüenza.
Fuente: Télam