La escuela dedicó media jornada a este importante acontecimiento, y los docentes no disimulaban su alegría por el momento que se vivía. Beatriz de la Vega, profesora de Plástica de cuarto grado señaló que leer es “un fenómeno maravilloso”, el cual muchas veces no es practicado como es debido por la presencia de la televisión, Internet y otros medios masivos. “Regalar un libro es el mejor obsequio que se le puede hacer a un niño”, subrayó.
Los apremios de la vida cotidiana pueden llevar a que los padres no cuenten con suficiente tiempo para acompañar a sus hijos y estimularles en el hábito de la lectura. Su presencia en la Maratón es una manera de incentivar en ellos el apoyo que desde el hogar pueden brindar a la educación de sus hijos. “Ver como los padres están leyendo junto a sus hijos realmente es algo muy lindo “, señaló la profesora de la Vega, quien aclaró que se realizan actividades post lectura relacionadas con la materia del profesor que le toque enseñar en ese horario. En su caso, luego de la lectura de leyendas catamarqueñas (ilustradas por artistas locales) los chicos debían dibujar la historia que acababan de leer.