Uno de los primeros en responderle a Macri fue el jefe de Gobierno porteño, Aníbal Ibarra, quien aspira a su reelección. Consideró como "un disparate jurídico y un concepto autoritario muy grave comparar a un ciruja con un delincuente".
Después de las polémicas declaraciones, Macri propuso -sin aclarar si lo hacía como candidato o propietario de las empresas recolectoras de residuos- que el trabajo de los cartoneros debería desarrollarse "en blanco, con cobertura médica y en lugares higiénicos" para convertir "un trabajo indigno e insalubre en uno formal y respetuoso".
(Télam)