Se refirió así a la decisión de la Corte Suprema de Justicia (CSJ) de la Nación del 13 de marzo último que determinó que no se deben judicializar los abortos en embarazos que sean producto de una violación.
En el mismo fallo instó al Estado nacional y provinciales a disponer de las condiciones médicas para llevar adelante estas prácticas de manera rápida, accesible y segura.
"El jefe de Gobierno tendrá que prepararse para asumir su responsabilidad por violar los derechos humanos", afirmó Natalia Gherardi, directora del Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA).
En el mismo sentido se pronunció Estela Díaz, referente de la Campaña Nacional por el aborto legal, seguro y gratuito, quien consideró "muy grave que el Gobierno porteño no respete el fallo de la Corte".
Para Bianco "es muy triste que una persona que quiere ser un líder político no respete la Constitución, a la Corte y a las leyes vigentes, y que además, desconozca como es la democracia al vetar una ley aprobada por mayoría por la Legislatura".
El viernes último, el Parlamento de la Ciudad votó una legislación para regular los abortos no punibles en los casos en que corra riesgo la vida o la salud de la mujer, o cuando el embarazo provenga de una violación, norma que coincide con el fallo de la CSJ.
"Los argumentos constitucionales ya los dio la Corte; Macri no puede vetar una norma que se ajusta a la normativa nacional e internacional, porque eso es fundamentalismo, ideología", agregó Gherardi.
"No puede, por sus convicciones personales, asumir una violación de derechos; tendría que preocuparse por defender la vida, y para eso, debe hacer mayores esfuerzos para brindar educación sexual, anticoncepción y tomar medidas preventivas de la violencia sexual", agregó.
En tanto Díaz consideró que la ley vetada por Macri "representa lo que opina la mayoría de la sociedad, por eso hay que insistir con esta norma y no aplicar protocolos restrictivos que violan los derechos de las mujeres".
La dirigente hizo referencia al protocolo de atención de abortos no punibles que firmó el ex ministro de Salud Jorge Lemus antes de renunciar a su cargo y que fue considerado "como restrictivo" por legisladores y especialistas, por los requisitos que imparte para el acceso al aborto.
Este protocolo es el que está vigente para realizar interrupciones de embarazos, según confirmó el Gobierno de la Ciudad cuando confirmó el veto a la ley de abortos no punibles.
Antes del anuncio, el Ejecutivo informó que el martes se realizaría el primer aborto no punible aplicando el llamado "protocolo Lemus" lo que fue considerado por Díaz "una puesta en escena".
"No puede anunciar que va a realizar un aborto no punible, porque está violando la privacidad y los derechos de esa mujer, sin respetarla, convirtiéndolo en un hecho político para encubrir que no cumple con la ley", aseguró.
Sobre este anuncio, Bianco enfatizó que "Macri desconoce que en la ciudad de Buenos Aires ya se hacen abortos no punibles sin hacer difusión alguna porque se trata de una práctica médica".
Fuente: Télam
