En un comunicado, el funcionario sostuvo que "lo que han hecho no es manifestarse contra el gobierno argentino, sino contra la sociedad toda".
"Me parece una vergüenza y un destrato hacia los argentinos que se empleen más de 70 mil dólares para denunciar políticas internas en una potencia mundial mientras no plantean ni cuestionan ese debate en los países centrales, donde hacen la vista gorda sobre el impacto y la falta de mitigación e incumplimientos de las grande potencias. Turbio, suma a la construcción de la argentina profunda que a veces no se ve desde las grandes ciudades", agregó.(Télam)