Catamarca
Jueves 28 de Marzo de 2024
Buscar:

"Memorias Impuras" o el sencillo acto de la lectura comprometida

La muerte del virrey de una imaginaria ciudad de Albora trae aparejado un sinfín de situaciones donde se mezclan familia, amantes, ciudadanos, un conjunto de razas que se rebelan antes una situación que cambiará por siempre el destino de la ciudad, en la novela Memorias impuras de la escritora Liliana Bodoc.
"La novela está inspirada en nuestra propia historia", resalta Bodoc en una entrevista con la agencia Télam: "Cuenta la época de las independencias de Latinoamérica, la Logia Lautaro, de los revolucionarios de mayo y de los virreinatos de América".

Este libro, editado por Suma de Letras, fue pensado originalmente como díptico. La primer parte "Los padres", se publicó en 2007 por otro sello editorial, y ahora se presenta una edición definitiva y completa que incluye esa primera parte a la que se suma "Los huérfanos".

"Básicamente ´Memorias...´ es un sustrato histórico-realista y está libremente ficcionanalizado. Quiero ser clara -agrega- no es una novela histórica. No hay referencias reales, no existe un virreynato de Albora; puede ser el Del Río de la Plata o cualquier otro".

La historia narra la vida lujuriosa del virrey Crispino quien muere y deja a su mujer Junia (perteneciente a la raza de los ´crudos´ -piel blanca-) quien se enseñorea de todos los espacios, y su amante (de raza cue cué -piel oscura-) Bérnaba, quien junto a sus hijos vivían en los fondos del Rodal Crudo, un lugar destinado para animales enfermos.

A lo largo de la historia el lector puede encontrarse con dificultades en la lectura debido a narraciones detalladas de situaciones crudas pero que ameritan ser contadas por la autora.

"Reconozco que la lectura es ´rebuscada y rara´ y es porque así fueron las historias que se tejieron en aquellas épocas", asegura.

La autora de "Los días del venado" cuenta que "partí de una premisa, de una coyuntura espacio-temporal, por decir de alguna manera, de una utopía y de un género literario que también podría denominarse novela histórica alternativa- no hay ninguna referencia histórica", revela.

La escritora santafecina quien también escribe para niños y adolescentes, aclara que no hay personajes fantásticos, magos ni duendes, sino que sus personajes son reales.

"Además hago un relato sobre los sueños de un grupo de mujeres negras, tiene que ver con la religión umbanda y las religiones afro que convivieron en el territorio durante mucho tiempo".

En su trabajo habla de religión, razas, poder, la iglesia, la ambición por el dinero, y ninguno de esos temas se tratan con liviandad, muy por el contrario sale a la luz cómo esos comienzos fueron la base de muchos temas que sobreviven en la actualidad.

¿Cuál fue el personaje que más te costó armar? "Junia, la esposa de Crispino, porque no quería que el lector la odiara. Fue una mujer desquiciada con una historia de infancia tormentosa, con una historia de amor-erótico con su padre. Le tengo piedad porque es un poco víctima, y quizás por eso me costó mantener una línea permanente".

"Después tuve un trato contradictorio con el cronista de la historia que es el que narra la historia central". El es el responsable de que todos conozcan la historia de Albora y su gente. "Es él quien decide lo que cuenta, lo que miente, lo que calla, lo que dice y no", enumera.

"En ese sentido fue una relación tensa porque de algunas manera es el más perecido a mí. Dice muchas de las cosas que yo pienso y creo acerca de la historia y la ficción", sostiene.

Y comenta que "si bien tengo poquita resistencia a lo escatológico, describo escenas duras, violentas por momentos, hay episodios de extrema crueldad, pero había que escribirlas porque tienen que ver con lo que sucede a diario, y no sólo en el país".

Pero hace una salvedad diciendo "todas las situaciones descriptas traté de macerarlas siempre con el lenguaje y contarlas poéticamente, aunque sea una situación cruel".

Bodoc asegura que "me gusta la idea de recuperar la dificultad de la lectura. Creo que estamos acostumbrados a leer en el subte o el colectivo, y a veces hay lecturas que necesitan un tiempo pensarlas, esa dificultad de algún tipo de lectura que nos enseña como lectores y personas".

Fuente: Télam

(Se ha leido 150 veces.)

Se permite la reproducción de esta noticia, citando la fuente http://www.diarioc.com.ar

Compartir en Facebook

Sitemap | Cartas al Director | Turismo Catamarca | Contacto | Tel. (03833) 15 697034 | www.diarioc.com.ar 2002-2024