Fraile consideraba que el cuento era el género más directo, infinitamente más difícil de lo que la gente creía, y sostenía que los editores prestan más atención ahora a los cuentos que hace décadas, "tal vez porque los lectores han advertido que la novela puede tener hojas de relleno, mientras que el cuento no puede permitirse el tener una sola línea superflua".
Fuente: Télam